lunes, 27 de noviembre de 2006

Domingo, 26 de noviembre

A estas alturas ya no tenía sentido ir hacia el sur, sino más bien acercarse al círculo polar ártico, así que rumbo a Rovaniemi.



¿Qué tiene Rovaniemi de especial? Pues que el grupo Lordi, ganador del último festival de Eurovisión -aquellos que parecían orcos fugados del Señor de los Anillos- son de aquí. Bueno, y que el famoso Alvar Aalto -famoso en Finlandia, porque fuera...- diseñó la recostrucción de la ciudad tras ser arrasada por los nazis. ¡Ah, y que tiene un bonito museo de la vida en Laponia en un espectacular museo llamado ARTIKUM!. Y ya está... Bueno, sí, y que está la oficina postal de Santa Claus, pero es que como yo soy de los Reyes Magos, pues como que no me va mucho.




Claro, cuando uno llega al círculo polar ártico, bueno pues parece como que está ya casi en el Polo Norte, verdad. Pues no, a nada más y nada menos que a casi 2400 km o algo así. Pues nada, que lo disfruten los pingüinos y las focas, que yo pasado mañana me vuelvo a mi Valencia, a mi tierra dorada por el sol, a por mi paella y a estar con los míos, que ya toca. Yo que siempre he presumido de apátrida, de ciudadano del mundo, al final va a resultar que sòc més valencià que el mateix Lizondo al seu millor temps, que per cert siga en pau. Visca la paella! Viscan les falles!

Sábado, 25 de noviembre

Aunque mi idea era haber subido al norte mi último fin de semana en Finlandia para practicar alguna actividad de las típicas de invierno por estos lares, a saber, trineo con Husky, o con renos, o hacer algo de country-sky. Sin embargo, como ésta es mi última semana, el dios Odin del norte se ha decidido a aguarme la fiesta enviando temperaturas altas (de 2º a 5ºC, tampoco creas que muy altas) y lluvias que hicieron desvanecerse la idea.





Así las cosas, a última hora, decidimos cambiar el rumbo e ir hacia el sur, pero empezando por la vista al zoo ártico de Ranua que está más bien al norte. Después de llegar allí, prácticamente no se veía nada, con lo que optamos por pasar la noche en el mismo pueblo de Ranua, pueblucho que yo juraría que es donde se rodó Doctor en Alaska. Como describir el lugar: renos por la carretera, todo el pueblo nevado y un hostal de madera pequeño y pintado de granate, como todas las casas típicas del sur de Laponia.


El lugar tiene que ser idílico en verano, al lado del lago, con su embarcadero, su sauna, las flores, etc, pero en invierno, poco se puede hacer en un sitio así. Bueno, caminar sobre las aguas... congeladas.


El zoo de Ranua merece la pena verlo, de hecho, es la única cosa se puede visitar en invierno en un radio de nos 200 km. La figura de blanco os aseguro que no es un teleñeco, ni el yeti, ni un amigo de supecoco, es un buho nival. También había águilas, halcones, castores, jabalíes, osos polares, osos pardos, lobos, linces y un sin fin de animales preciosos y normalmente con bastante espacio.



Probablemente los animales más típicos sean los renos y los alces. Estos últimos impresionan porque son tan grandes como un caballo, pero dóciles y tranquilos para ser animales salvajes. Además de verlos en el zoo, se ven en la carretera y de hecho hay que tener cuidado. Al año mueren unos 100 alces por accidentes de tráfico, y chocar contra esa mole no tiene que ser una experiencia nada agradable.

Lunes, 20 de noviembre

Tal día como el 20 de noviembre de 2006, avioncito a Helsinki para reunión de trabajo, comida a base de salmón en el hotel, nueva reunión por la tarde y habitación compartida por la noche. Pues sí, o compartía habitación con mi compañero David, o me tocaba irme a más de 80 km de Helsinki a causa de la 2006 IST Exhibition. Tuvimos una cena romántica en el hotel, pero por la noche no pasó nada -que yo sepa-, con lo que Begoña puede dormir tranquila. Al día madrugamos -pero sin pasarse- para ir a ver el centro de Helsinki antes de dejarnos caer por la exhibición. Día gris para variar, aunque las fotos engañan tras hacer un autoajuste de brillo, porque lo que es brillo del sol, casi que brilló por su ausencia.









Y después del paseo y de comprar unos recuerdos -sí, vale, subvenirs de guiri- nos fuimos a la IST Exhibition, evento donde se muestran los resultados de los principales proyectos de investigación relacionados con las Tecnologías de la Información del VI Programa Marco de la Comisión Europea. Tras merodear un rato para ver qué es lo que se está haciendo en Europa en estos temas, hacer algunos contactos y apropiarme de algunas ideas, saludamos a nuestros amigos del VTT, como Jouni, con el que me hice una foto de esa guisa: la chaqueta por encima de la funda de la cámara como si llevara una porra o una cartuchera, y la acreditación verde, colgand entre la chaqueta y la camisa... ¡Espero no haber estado todo el día dando esa pésima imagen de desaliñado!

miércoles, 22 de noviembre de 2006

Sábado, 18 de noviembre















Hoy hemos quedado para hacer unas compras por el centro aprovechando la visita de Vicente a Oulu. Los que tenemos niños hemos estado mirando peluches de reno y subvenirs varios, pero Fede, el gran chef italiano, se ha dedicado a comprar exqusiteces como setas para su risotto, virutas de alce curado, etc. El mercadillo del centro de la ciudad bien vale una visita. Son casitas de madera bastante antiguas donde se aternan las tiendas con los pub. Hoy la temperatura estaba alrededor del los 3ºC pero aún quedaba bastante nieve como se puede observar en las fotografías.


La comida la hicimos en una taberna de madera que hay en una isla en el centro del río donde nos tomamos unos deliciosos entrantes típicos finlandeses (carne de alce cruda, salmon ahumado, queso azul finés, picado de setas, algo parcido a sardinas en vinagre y, como no, frutas del bosque) seguido de un buen plato de carne. Claro, después hay que bajarlo todo, así que a pasear por la ciudad. Tras atravesar el puente peatonal que nos devuelve al centro de la ciudad, pasamos junto a la biblioteca, que curiosamente está abierta los sábado y domingos mañana y tarde -a diferencia de España- y que además se encuentra abarrotada -de nuevo a diferencia de España-. Nos dirigimos hacia el ayuntamiento y la catedral, y descubrimos que en la parte trasera del ayuntamiento hay unas curiosas esculturas en bronce que muestran la evolución de los habitantes de Oulu desde su fundación, desde los ancestrales pescadores de salmón hasta los actuales ejecutivos con su Nokia, como no podía ser de otra manera. Y eso es todo por hoy.









viernes, 17 de noviembre de 2006

Viernes, 17 de noviembre

Por fin las temperaturas han subido: ¡estamos a 1,5ºC!. Sin embargo, quién me iba a decir a mí que iba a echar de menos el frío. Ha empezado el día nevando y después no parado de llover. La mezcla de agua y nieve es como si se hubiera derramado un millón de toneladas de horchata granizada a tus pies, y caminar así se convierte en una tarea harto complicada.

Hoy es un día de novedades. Empezemos por las gratas. He experimentado el rito de la sauna nórdica y no tiene nada que ver con lo que mi subconsciente imaginaba: unos cuantos tíos en bolas y sudando a lo bestia. Para empezar, me he sentado al lado opuesto al del calentador con piedras donde se echa el agua que genera la corriente de vapor a 100ºC. ¡Craso error, la corriente va directa justo ahí donde me había ido a sentar!. Para continuar, el finés de turno -que te ve la cara como de que se te acaba el aire- resulta que disfruta con ello, con lo que echa aún más agua. Luego te dicen que te quedas relajado, nuevo y feliz... ¡pues claro, piensas que has sobrevivido a una especie de asadsinato!



Después hemos cenado platos típicos del país: cerveza casera (está muy rica, sólo que no la dejan fermentar lo suficiente), filetes de reno (si Papa Noel no viene este año, no le digáis a los niños que es por mi culpa por habernos zampado a sus renos), frutas del bosque y vino español (Sangre de Toro de Torres con un toro de plástico como subvenir...¡estos guiris!).

Ahora toca la novedad menos grata... mi abuelita está bastante mal. Desde aquí un beso y mi plegaria para que se recupere.

lunes, 13 de noviembre de 2006

Domingo, 12 de noviembre

Bien, ¿qué puede hacer uno un domingo de invierno -aquí se pasa del verano al invierno sin contemplaciones- en un sitio como Oulu?. Pues levantarse sin prisa, poner música y desayunar leyendo la última novela que uno tenga entre manos. Y después de trabajar un rato, a comer, porque en eso ha llegado Fede y ha cocinado una riquísima pasta -¿qué va a cocinar sino un italiano?- con salsa boloñesa y queso parmesano, por supuesto. La hemos acompañado con una espinacas con besamel, bacon y queso fundido -algo tengo que cocinar yo para dejar el pabellón nacional en buen lugar- y que directamente hemos guardado en la nevera porque no podíamos más. Después, para bajar la digestión, pues paseito, pero sólo hasta la parada del autobús. ¡Cualquiera se da un garbeo a -5ºC de más de 5 ó 10 minutos!. Hemos llegado a Oulu a las 15:30 y como a esa hora empieza a anochecer, aprovecho para hacer un par de fotos a los edificios más significativos de la ciudad antes de que se vaya del todo la luz. Los edificios son el Ayuntamiento y la Catedral protestante de Oulu.





















La idea era ir a ver el museo de la ciudad -museo etnológico- y ha resultado que cerraba a las 16:00. La pena me embargaba... De allí nos hemos ido al museo de arte (¿?) de la ciudad, museo que si alguien se ha perdido, pues eso que se ha ganado. Creo que casi hubiera preferido el museo de etnología... ¿me estará afectando ya la soledad y el aislamiento del frío y la nieve? ¿seré el nuevo Jack Torrance de la segunda entrega de "el Resplandor"?.

Lo mejor ha sido el rato en el pub del centro, una bonita y antigua contrucción de madera llena de finlandeses bebiendo cerveza, donde nos hemos tomado un choclate caliente y un té.

sábado, 11 de noviembre de 2006

Sábado, 11 de noviembre

Hoy, como estoy como el día, más bien gris, voy a colgar na foto de mis niños, que los hecho de menos, especialmente a Ricardo que´está hoy con 39ºC de fiebre. ¡Un besito para él!